A partir de esta media noche, termina la obligatoriedad de presentar el certificado en los bares, restaurantes, gimnasios y residencias.
Una vez valorado el informe que ha encargado al comité científico, el gobierno ha decidido acabar con esta medida a partir de esta media noche.
La decisión se toma en un momento en el que, pese a que la variante ómicron sigue batiendo récords de contagios, las UCI están estabilizadas.
El ómicron disminuye la efectividad del certificado
La aparición de la variante ómicron ha modificado la efectividad del pasaporte. En un contexto en el que buena parte de la ciudadanía vuelve a ser susceptible a contagiarse, aunque se hayan vacunado o hayan pasado la enfermedad, la obligación del certificado covid es una medida que pierde efectividad.
Este martes, la portavoz del gobierno, Patrícia Plaja, había explicado que el certificado tenía como objetivo reducir los contagios y, con la nueva variante, no está sirviendo.
Este cambio coincide con el fin este viernes de casi todas las restricciones para frenar la pandemia. Se acaban las limitaciones en los aforos en la restauración o en los equipamientos culturales y deportivos, se vuelve a los horarios habituales y ya se podrán realizar encuentros de más de diez personas. Hace una semana, también terminó el toque de queda.
La única medida que todavía se mantiene es el cierre del ocio nocturno, que tendrá sus persianas bajadas unos días más. Según el sector, el gobierno le ha trasladado este martes su intención de reabrirlo el 11 de febrero.
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Las restricciones en el bar La Loli no se cumplen nunca tienen en el ( tablao de la calle ) 3 toneles que los hacen servir de mesa y casi siempre hay más de 10 personas juntas y las mascarillas brillan por su ausencia y la Policía y los Mossos no pasan nunca a controlarlos y las personas que seguimos las leyes por la calle con las mascarillas puestas es una vergüenza